Ahora a mi novia solo le gusta follar frente a la webcam

Maldigo el día en que le propuse a mi novia hacer algo distinto para alimentar nuestro morbo. En cuanto encendí la webcam y se vio en la pantalla desnuda, se puso más cachonda que nunca. Pero eso no fue nada: en cuanto entré al videochat porno y vio cómo empezaban a conectarse chavales para verla desnuda, enloqueció de placer. ¡La guarra tuvo el primer orgasmo sin tocarse! Esa noche nos pasamos como cinco horas follando frente a la webcam, complaciendo todos los pedidos que nos hacían los pajeros. Ahora, no hay forma de conseguir que me deje follarla si no es con público a través de pantalla.